Ha llegado el verano y con él las altas temperaturas. Los olivos estarán intentando mantener sus hojas y ramas en buenas condiciones para darnos el mejor Aceite de Oliva Virgen Extra.
Por lo que refiere a nosotros, los humanos, es una época sensacional para introducir en nuestra dieta diaria ensaladas, pescados, arroces y pastas frías, todo por supuesto aderezado con aceite de oliva virgen extra.
Consumirlo a diario es un extra para nuestra salud, no hay duda. Pero también es importante que durante los meses más calurosos tomemos medidas para que no pierda propiedades.
Para ello es recomendable poner la botella de Aceite de Oliva Virgen Extra bien cerrada en un lugar seco y fresco, protegido de las temperaturas excesivas propias de esta época.
Ayuda a proteger las células del organismo frente al calor
Gracias al aceite de oliva virgen extra podrás absorber mejor ciertas vitaminas como la vitamina K (verduras de hoja verde), E (frutos secos, hortalizas de hoja verde y semillas), D (pescados azules como caballa, salmón y atún) y la vitamina A (que encontramos en el tomate, zanahoria o maíz).
Por tanto, siempre que consumas estos alimentos, lo ideal es que lo hagas junto con aceite de oliva virgen extra. Algunas vitaminas son vehiculizadas por las grasas (vitaminas liposolubles), por lo que gracias al aceite, se podrán absorber mejor al cuerpo y disfrutar de sus beneficios.
Un aliado de tu piel
el Aceite de Oliva Virgen Extra es una excelente alternativa que permite hidratar la piel en profundidad, suavizarla, prevenirla del envejecimiento prematuro y protegerla de las agresiones generadas por los rayos solares.
En verano nuestra piel y nuestro pelo también sufren las consecuencias del calor, del cloro y del agua del mar. Puede que se trate de un periodo de descanso, pero nuestra piel no descansa y nos acompañará mientras vivamos.
Por eso, necesita que la mimemos y la cuidemos.
- Hidratante de labios: nada mejor que aplicar un poquito de aceite de oliva virgen extra. Si dejas que el aceite actúe durante unas horas, notarás que están mucho más hidratados y que lucen un aspecto más sano y atractivo.
- Cuidados tras la depilación: cuando aparecen esos antiestéticos granitos y la piel adquiere una tonalidad rojiza poco favorecedora. Si nos depilamos con cera, puede servirnos también para retirar la cera que se haya quedado adherida a la piel, pero sea cual sea el método de depilación que empleemos, siempre favorece la hidratación tras la agresión.
- Mascarilla para el pelo: el cloro y el sol provocan daños en nuestro cabello, En estos casos siempre funciona que, antes de lavarnos el cabello, utilicemos aceite de oliva a modo de mascarilla.
- Picaduras de insectos: que levante la mano quien no haya sufrido la picadura de los mosquitos en verano. Qué podemos hacer cuando nos incordia esa picadura y no tenemos una loción antimosquitos o nos causa alergia y no podemos utilizarla o cuando, simplemente, queremos evitar salir a comprarla. Algo que funciona para bajar el picor y la inflamación inicial es aplicar unas gotitas de aceite de oliva en la zona.
Ya veis el aceite de oliva virgen extra es un gran aliado: ¡insustituible durante el verano!