En Navidad no hay nada más atractivo que una mesa bien puesta, que seduzca, que invite a todos los comensales a sentarse para degustar todos los alimentos que se han preparado.
Con una mesa bien vestida podemos conseguir una atmósfera armoniosa, perfecta para compartir con familiares y amigos.
Los platos que hayamos preparado ganarán en presencia y vistosidad. ¡Y es que no debemos olvidar que también se come por los ojos!
Funcionalidad al poder
Es necesario que tengamos presente que es necesario que exista un equilibrio entre elegancia y comodidad.
Sí, es aconsejable utilizar detalles como candelabros o centros… pero preferiblemente de diseño bajo para que no obstaculicen los movimientos en la mesa de nuestros invitados.
Una mesa excesivamente sobria no resultará atractiva, pero también debemos rehuir sobrecargarla. Al final se trata de que todos los invitados puedan sentirse a gusto.
Evitaremos pues la presencia de elementos decorativos y de complementos excesivamente voluminosos o llamativos ya que no ayudarán mucho.
El orden, el principal aliado de tu mesa en navidad
Cierto orden es esencial, tanto en la vajilla como en la cubertería.
También hay que contar con detalles como las servilletas: si son de tela mucho mejor.
Los bajo platos, los recipientes para servir, las copas para las bebidas, los centros de mesa, el mantel a juego… todo tiene que respirar cierto orden y armonía.
Acéptalo, necesitas espacio
No hay nada peor que una mesa en Navidad que se desborda de platos, cucharas, cubiertos y codos que se tocan. Si la superficie de nuestro comedor es limitada, ¿qué tal si consideramos invertir en un carrito o en una mesa lateral para descargar la mesa principal. Podremos disponer de ellos en otras ocasiones importantes durante el resto del año y nos aportarán un extra de orden y espacio.
Mantelería
Es cierto que en estas fechas encontramos una gran cantidad de manteles de papel y de plástico con divertidos estampados… pero es mejor evitarlos si queremos conseguir una “mesa 10”.
En estas fechas se recomienda que las mesas vayan vestidas hasta abajo. Hay también prestar atención a los tejidos. Por la caída que tiene, puede quedar muy bien un tejido como el lino, o mezcla de lino y algodón.
Es imprescindible que el mantel esté bien planchado (y, por supuesto bien limpio).
El montaje se puede hacer con un mantel que llegue hasta el suelo o juntando dos piezas cubriendo por un lado y por el otro.
En estos casos un mantel de cada color, o con estampados que “casen” para marcar la diferencia entre ellos, puede ser muy buena idea.
Vajilla
Hay una gran variedad tanto en materiales como en formas. Lo más importante es que la vajilla se adecue a la forma de la mesa. Si esta es lo suficientemente grande, a la izquierda del plato principal se coloca un platillo para el pan.
La Navidad es la ocasión perfecta para usar bajo platos. Los dorados, los plateados o rojos suelen ser los favoritos de estas fechas para contrastar con el blanco de la vajilla.
Cubertería
No es necesario que utilices la cubertería que te regalaron para la primera comunión ni la de tu boda si no lo deseas… para tu mesa en navidad es de nuevo sólo una cuestión de orden.
Es importante que todas las piezas de cubertería sean iguales o de la misma línea, eso sí.
Recuerde que el montaje de cubiertos se coloca de fuera hacia dentro, es decir, al primer plato le corresponden los cubiertos de fuera, siempre siguiendo el orden de colocación adecuado a la utilización de cada mano.
Si se desea colocar los cubiertos de postre antes de que éste se sirva, estos se sitúan en la parte superior del plato.
Cristalería
Las copas deben estar bien alineadas frente al plato, de izquierda a derecha empezando por la de boca más ancha (que utilizaremos para el agua).
A la hora de elegir una cristalería tendremos en cuenta aquello de que “menos es más”.
Podemos utilizar diseños moderns, coloridos y con fantasía, pero cuidado. Siempre nos facilitará más las cosas optar por un diseño clásico y sencillo que otra con líneas demasiado modernas. La razón es que podemos acabar creando estridencias innecesarias y sembrando la confusión sobre cuál es la copa adecuada para el agua o para el vino.
¡No olvidéis que el cava se debe servir siempre en una copa estrecha y larga!
Centros navideños, la clave
Los centros navideños son el principal atractivo de una mesa durante estas fechas.
Últimamente se han impuesto los centros con follaje verde y frondoso. Lo cierto es que crean un ambiente bastante adecuado para una mesa en navidad. Los motivos vegetales nunca están de más. Es curioso como de favorecedores pueden resultar elementos como las piñas, ramas o frutas.
Si no dispones de ningún elemento vegetal también es tendencia decorar con bolas navideñas metidas en recipientes de cristal.
Las velas, si queréis ponerlas, preferiblemente que sea de noche, y deben estar siempre encendidas. Evitaremos las velas con olor intenso. Las flores también pueden ser una buena opción a tener en cuenta, especialmente si queremos un ambiente natural y fresco.